Caracas, 4 de septiembre de 2025. — El mundo de la moda perdió a uno de sus más grandes referentes: Giorgio Armani, el diseñador italiano que transformó el vestir masculino y femenino con un estilo elegante, sobrio y minimalista, falleció este jueves en Milán a los 91 años, según confirmó oficialmente su casa de moda.
Armani murió en su residencia, acompañado de sus seres queridos, tras meses en los que su estado de salud ya había generado preocupación. A pesar de ello, se mantuvo activo en la dirección creativa de su firma hasta los últimos días.
El revolucionario del traje
Nacido en 1934 en Piacenza, Armani estudió medicina antes de abrirse paso en el diseño. En 1975 fundó su propia marca y rápidamente se convirtió en un fenómeno internacional: suavizó los trajes rígidos, impuso cortes ligeros y transmitió una nueva visión de la elegancia masculina.
El gran salto a la fama llegó en 1980, cuando vistió a Richard Gere en American Gigolo. Desde entonces, Hollywood y la industria musical adoptaron sus diseños, y Armani se consolidó como un imprescindible en las alfombras rojas, incluidos los premios Oscar.
Un imperio más allá de las pasarelas
El apellido Armani trascendió la moda para convertirse en un emblema de lujo. La marca expandió su influencia con líneas como Emporio Armani, Armani Exchange y Armani Privé, además de hoteles, restaurantes, mobiliario y fragancias.
En Venezuela, sus perfumes y relojes se convirtieron en símbolos de estatus durante décadas, al punto de ser parte de la cultura urbana y de la aspiración de una generación que veía en Armani el reflejo de la sofisticación europea.
Despedida y homenajes
El Grupo Armani anunció que se instalará una cámara ardiente en Milán los días 6 y 7 de septiembre, abierta al público, mientras que el funeral será privado, tal como lo había solicitado el propio diseñador.
Las reacciones en el mundo de la moda no se hicieron esperar. Diseñadores italianos y colegas de todo el planeta expresaron su tristeza, entre ellos Donatella Versace, quien afirmó: “El mundo perdió hoy a un gigante”.
Un legado imborrable
Armani deja tras de sí un imperio valorado en más de 10.000 millones de dólares y una visión estética que marcó la segunda mitad del siglo XX y lo que va del XXI. Su legado, sin embargo, va más allá de los números: transformó la moda en un lenguaje universal y convirtió la sobriedad en un símbolo de poder y modernidad.